Llevo años atendiéndome acá, para lentes ópticos y de sol. Trabajo en obra, por lo que la calidad y durabilidad de los anteojos es fundamental para mí. Otra cosa realmente importante es que no me quita tiempo laboral: está cerca del metro, en plena Providencia y dan una atención muy eficiente.

Me atiendo en esta óptica por la calidad, pero también por la atención. Siempre me reciben como a una amiga más que como a una clienta y me atienden sin apuro, poniendo atención a todos los detalles estéticos y oftalmológicos. Además, la oficina es acogedora y me atienden los propios dueños.

Sufría jaquecas y mareos. Supe que era causa de un astigmatismo gracias a un chequeo que nos hicieron en la oficina, por un convenio con la óptica. Me preocupaba gastar en comprar anteojos, pero nos dieron un buen precio, en cuotas y descontable por planilla. Mis lentes me cambiaron la jornada. Ya no me agoto ni me duele la cabeza. Además son bonitos y no tuve que moverme de mi escritorio, porque los enviaron directo a la oficina.